La incorporación de la madre al trabajo tras su baja de maternidad no significa necesariamente que tengas que dar por finalizada la lactancia materna a tu hijo o hija. Afortunadamente la leche materna se puede conservar durante algún tiempo refrigerada.
A continuación contestamos a la pregunta sobre cuánto dura la leche materna, cuál es la mejor manera de conservarla así como los métodos más fáciles para extraerla convenientemente.
Duración de la leche materna refrigerada
Como casi cualquier otro alimento, la leche materna se conserva mucho mejor en frío que a temperatura ambiente. A continuación ponemos unos tiempos orientativos a partir de los cuales no se debería administrar la leche al bebé.
El calor echará a perder la leche con rapidez. Si la dejamos a temperatura ambiente entre 23º y 25º la leche solo aguantará entre 4 y 8 horas.
Si la temperatura ambiente baja de 19 a 22 grados puede aguantar hasta 10 horas y a 15 grados aguantará hasta 24 horas.
En la nevera o refrigerador a una temperatura entre 1 y 4 grados se puede consumir perfectamente envasada entre 3 y 5 días después de su extracción.
La leche congelada aguantará unos 3 meses a -16 grados y en un congelador potente a -19 grados puede llegar hasta los 6 meses.
Cómo extraer y almacenar la leche materna
Siempre que vayamos a extraernos leche debemos ser muy cuidadosos con la higiene tanto de nuestras manos como de los recipientes en los que vayamos a almacenarla.
A continuación te proponemos algunas bolsas de congelación y conservación realmente efectivas.
Medela – Bolsas para congelar la leche materna
Se puede extraer la leche de forma manual o utilizando algún tipo de sacaleches. En el caso de que se trate no de una ocasión puntual sino que por una hospitalización o causas laborales la extracción de la leche se vaya a prolongar durante un tiempo recomendamos la utilización de algún sacaleches con el que podremos conseguir la cantidad adecuada para una toma de manera mucho más rápida.
Si vas a congelar la leche se recomienda hacerlo en pequeñas cantidades para que puedas descongelar solamente lo que vayas a necesitar.
La descongelación se puede hacer introduciendo el envase (bolsa o bote de plástico) en agua templada y cuando lleve un poco de tiempo añadirle agua un poco más caliente.
En la bolsa o envase de conservación se debe apuntar la fecha de la extracción y la cantidad extraida.
Recuerda siempre que no debes volver a congelar la leche descongelada anteriormente.
Niño mamando por Felipe Skroski.