La neumonía es una enfermedad que, pudiendo llegar a ser grave, en la mayoría de los casos se cura en más o menos tiempo siguiendo un tratamiento en nuestro propio domicilio sin necesidad de hospitalización.
Aquí te contamos cuánto suele durar una neumonía así como, qué tipos de neumonías hay, qué tratamientos son los más aconsejables y recomendaciones que podemos adoptar para encontrarnos mejor mientras la padecemos.
Cuál es la duración de una neumonía en adultos
La neumonía es una enfermedad que afecta a los pulmones y cuyo origen puede ser vírico o bacteriano.
Las neumonías bacterianas pueden hacer que el enfermo se sienta peor, por fiebre más alta y malestar, sin embargo este tipo de neumonías pueden mejorar rápidamente si se le aplica un tratamiento a través de antibióticos.
El período de incubación de las neumonías es muy variable dependiendo del virus que la provoque y puede oscilar entre las 24 horas y las 2 semanas.
Una vez que los síntomas de la neumonía dan la cara la enfermedad puede durar entre una y dos semanas hasta que desaparecen la mayor parte de los síntomas. La tos suele ser un síntoma que tarda más en desaparecer pero la fiebre y el malestar suelen remitirá al cabo de estos días salvo en los casos más graves que incluso pueden requerir de hospitalización.
cuánto dura el tratamiento de la neumonía
El médico, ante la sospecha de una neumonía puede solicitar algún análisis de sangre o incluso una placa de torax para confirmar este diagnóstico.
Si la neumonía es de origen bacteriano se puede recetar antibiótico, en el resto de casos se pueden administrar analgésicos y se recomienda descanso en domicilio e hidratarse con frecuencia.
Cuáles son y cuánto duran los síntomas de la neumonía
Los síntomas más habituales son fiebre, tos, cansancio, dolor en el pecho y dificultad para respirar.
En algunos casos también se puede observar vómitos y una respiración ruidosa y anormalmente rápida.
La fiebre será más alta en las neumonías bacterianas y además se puede notar cierta inapetencia y un mayor cansancio y malestar general.
La mayor diferencia en los síntomas con una infección común de vías altas es por la mayor dificultad en la respiración. A un paciente con neumonía tiene la sensación como de que le cuesta más respirar profundamente y por esta razón las respiraciones suelen ser mucho más superficiales y rápidas.
Radiografía de torax por Silvana.